Yo me incluyo en el grupo de jugadores no satisfechos con la invisible dificultad de algunos videojuegos, pero ¿qué pasaría si fuese todo lo contrario, y los grandes clásicos sufrieran una dificultad impresionante?
Sería muy parecido a esto que os enseño a continuación:
Nadie me negará que las risas en las tardes de colegas estarían aseguradas.
Publicado por Skaltum